Noche de velitas, las dos caras de la moneda
- 21n Informativo
- 8 dic 2024
- 2 Min. de lectura

Velas y faroles, alabanzas y carreras, tumulto y mucha luz, así se vive la tradicional noche de velitas en el departamento del Quindío, en la que se resalta la recuperación de espacios para compartir en familia, los eventos centrados en la exposición de los faroles con diferentes temáticas, que hacen que el Quindío reluzca a nivel nacional.
Este año, Quimbaya revivió el evento que hizo famoso al municipio, en donde los políticos y autoridades se regodearon de lo bien que hacen su trabajo, mientras que las verbenas navideñas de Armenia, se roban la atención de los perseguidores de contratos que suplican que se le den titulares a estos eventos tan magnánimos.
Le puede interesar: La sombra oscura detrás de los reinados en el Quindío
Y sí, la noche de velitas es un espacio encantador para llenarnos de paz, tranquilidad, agradecer por lo que llegó este año y elevar los deseos más profundos de nuestros corazones, a través de una luz, este año el espectáculo ha sido diferente a los años anteriores, sin embargo, esta noche tiene dos caras.
Noche de velitas, las dos caras de la moneda: una noche de regocijo, amor y mucha pólvora, animales perdidos, mascotas atropelladas, fauna silvestre desorientada, falta de control en la quema de elementos explosivos y delincuencia.
Tres personas resultaron quemadas en la noche de velitas, varios accidentes de tránsito se reportaron en la madrugada de 8 de diciembre y las denuncias por hurto no se hicieron esperar, el pan de cada día y más en medio de los tumultos de gente.
Sin embargo, mientras los contratistas adulan los faroles y las velas, los recursos del departamento siguen tratando de justificarse a toda costa, los delincuentes hacen de las suyas y las campañas políticas aprovechan las temporadas para ganar el corazón de los incautos a punta de regalitos baratos que más adelante costarán otro período de fiascos en la región.
Así se vive la noche de velitas, entre ave marías y apropiación de recursos, entre natilla y contratos a dedo, entre verbenas y denuncias por acoso dentro de los edificios administrativos, entre prohibición de venta de pólvora y animales aterrados y muertos a causa de las detonaciones, pero es diciembre y hay que disfrutarlo.







Comentarios